¡QUE VIVA LA ROPA USADA!

Dejémonos de huevadas... Todos hemos recurrido alguna vez al ropavejero para sumar algún trapo a nuestro vestuario. Unos más, otros menos, todos hemos taconeado algún fin de semana por la Feria 16 de Julio, la Honda o la Figueroa y hemos terminado la jornada con alguna prenda de medio uso en nuestros roperos. Sí, admitámoslo a viva voz: somos un ejército de millones de clasemedieros caminando por las calles del país luciendo la ropa que vistió algún Mr or Mrs Smith en Miami o New York. La culpa de ello es en gran medida de los propios textileros bolivianos. Aquellos que confeccionan para el mercado de exportación prendas con material de primera, pero que dejan para el mercado interno diseños de segunda, que al cabo de un mes han perdido su color y su forma. Culpables son los políticos que desde los años 80 inundaron el área rural con ropa usada, regalándola para ganar algún voto. Ahora, ¿quién podrá frenar este vendaval? Por mi parte, sólo quiero agradecer a doña Clara, don Facundo y Justina... Gracias por permitirme vestir este vaquero GAP y esta polera Nautica, que aunque usaditos, me quedan bien cache.