viernes, julio 4

ENCUENTRO DE ESCRITORES / DÍA 2 / "BENAVIDES, EL CAZA-MITOS DE LA LITERATURA"

Un halo romántico rodea a la Literatura. Halo que impulsa la construcción de imaginarios cuasi novelescos en torno al oficio del escritor. El peruano Jorge Eduardo Benavides es, por así decirlo, un cazador de mitos literarios. Una tarea que le ha servido a él mismo para afinar su tarea de escritor. 

El coqueto corbatín celeste que Benavides lució el día de la inauguración del 8vo Encuentro de Escritores Iberoamericanos lo hizo punto inevitable de las miradas del público. Y al tomar desde la testera la posta del micrófono, el también profesor de escritura creativa terminó por completar la seducción con la gente de con el ácido pero fino sentido del humor con el que bañó su ponencia. 
Que el autor debe estar con un vaso de trago en una mano y la otra en el teclado, que la musa de la inspiración existe y se bloquea de tanto en tanto, que leer compulsivamente hace a uno un mejor escritor…; en fin, Benavides se dio la tarea de desmontar en su charla mitos que, en muchos casos, son impulsados por los propios creadores. 

Lo primero que Benavides dejo claro es que si alguien aspira a ser escritor se debe asumir las responsabilidades que este es un oficio que requiere seriedad. Y si uno no está convencido de ello, pues es mejor dedicarse a otra cosa.

Benavides identificó dos tipos de escritores: los de brújula y los de mapa. Los primeros son los que encaran la escritura sin una planificación previa, los que andan tentando el camino y descubriendo paso a paso el sino de su obra a través de su intuición. El autor de mapa, por el contrario, encara el proceso creativo a través de la elaboración previa de una estructura que ayuda a vislumbrar el sendero que se andará. 

“No elaborar un esquema de una novela es insensato porque equivale a que uno le pregunte a un arquitecto cuántos pisos tendrá el edificio que construye y éste responda: ‘no sé, unos 15 o 20’”.

Y, obviamente, Benavides se adscribe a esa camada de creadores esquemáticos que funcionan con plazos lógicos. Esto implica saber las bases de lo que se escribirá antes de sentarse frente al computador. “No creo en el bloqueo de la inspiración. Cuando alguien me dice que sufre por el vértigo de la página en blanco yo le digo: ‘Escribe en páginas azules’. Porque ese tipo de escusas demuestran que uno desea escribir pero que en realidad no quiere hacerlo”.

Y aunque “un escritor es un mentiroso con todas las coartadas posibles”, éste debe creer en lo que escribe. Ese es el mecanismo interno que le da verosimilitud a lo que escribe.



Sobre el mito de que leer más te hará un mejor escritor, para el peruano es como decir que ver cine todos los días te hará director de cine. “La literatura es un oficio que no se enseña con materias”.

La charla de Benavides fue amena y didáctica. Cosa que se agradece y que debiera ser requisitos obligatorios en la pedagogía nacional. Y para cerrar este capítulo, una de las balas lanzadas con estilo por Benavides: “En el mundo de la crítica literaria están los “crípticos, a los que no se les entiende nada; los “cítricos” que son los más ácidos, y en medio de ellos están los críticos de verdad que despejan los procesos vivenciales de la novela”.

No hay comentarios: